NUESTROS ESTUDIANTES AL DESNUDO.-

“..Que vivan los estudiantes jardín de nuestra alegría
son aves que no se asustan de animal ni policía
y no le asustan las balas ni el ladrar de la jauría
/caramba y zamba la cosa, que viva la astronomía.” *

Pulso a pulso, nuestros estudiantes han impuesto una forma de lucha libertaria. Lucha que cada día inspiran más respeto y despierta el orgullo parental, de madres y padres, que han sabido sembrar en estos jóvenes la semilla de la democracia, la justicia, el deber y la libertad y el amor por la patria.

Muchas vidas han quedado en el camino, mucho dolor diseminado en las almas, el gusto amargo de la injusticia se saborea y se supera; porque es el combustible que mueve la pasión hacia el objetivo a lograr, que no es otro, que el rescate de la madre que nos parió.

En muchas ocasiones he hablado de Alí Primera,  poeta expropiado por los oportunistas de turno, quienes  arrancan los versos del contexto global, para que sirva a sus malvados fines. Sin embargo,  y a pesar de los enemigos, todo está escrito e inequívocamente, esas letras eran para un pueblo sufrido, no para sus cancerberos y ese deseo de Alí, sigue presente esperando que los legítimos dueños de sus cantos los vuelvan a retomar e icen ese estandarte musical,  con orgullo venezolano.

Removida desde lo más profundo  y con la responsabilidad que implica saber, conocer y tener deber de educar, me planto acá, para expresar lo que veo y siento, respecto a estos guerreros de la esperanza y la paz que son nuestros jóvenes estudiantes. Un Orgullo para la Venezuela que aún vive en nuestra memoria y a la cual nos negamos a renunciar, con un grito salido de las entrañas:  ¡VENEZUELA NO SE RINDE, CARAJO!!!

Hoy miro hacia atrás y veo con más vigencia que nunca, esas letras nacidas del sincero dolor del poeta del pueblo: Alí Primera.

 "... los que mueren por la vida

    no pueden llamarse muertos

   y a partir de este momento

   es prohibido llorarlos.”**

Y así, en ese mismo tono de honor, lo testimonió con orgullo y sufrimiento la madre de : Bassil da Costa, joven que perdió la vida en su vuelo decidido en busca de la justicia, la paz y la libertad.  Esta madre, que es la madre de todos los jóvenes que luchan hoy, dejó bien claro su decisión de no llorar a su hijo y de la importancia que cobra la muerte de un hijo, cuando lucha por la libertad de su Madre Tierra.

Por ello, me atrevo a afirmar que no todo está perdido, todo desde ellos, es esperanza, fe y lucha caminante. ¡ENTONCES, CAMINEMOS CON ELLOS!!!

Debo aclarar, que mi compromiso no es con toldas, grupos, partidos, amigos, e intereses perversos. Mi compromiso es con los que se restean en la calle y dejan sudor, lagrimas y vida en ese campo de batalla desigual en que se han convertido todos los rincones de nuestra amada Venezuela.

Estoy más que convencida que a nuestros hijos, porque todos los jóvenes venezolanos son nuestros hijos,  no los traiciona la genética, llevan tatuados en sus espíritus las líneas trazadas por lo libertadores  que, otrora se hicieron de la libertad, dejando los campos de lucha bañados por la sangre de los hermanos, y  ese es el ejemplo, que históricamente, nos  ha identificado como PATRIA LIBRE.

Ahora bien, nuestros muchachos, todos los días son atacados desde flancos diferentes y con estrategias deleznables, cual mas, pero esa fuerza de la libertad sembrada añejamente, es inquebrantable y, por eso, se exponen, se arriesgan y camina a paso de vencedores a consolidar su triunfo. Nada los hace desmayar, ni los más viles métodos asesinos que se despliegan en su contra. Allí están, sumidos a la inclemencia de la intemperie, como Davies que lucha con muchos Goliats. ¡ Y vencerán…!! Dios lo ha de querer así…

Por eso, los personeros - desnudos- del desgobierno, podrán con  prácticas de agavillamiento, desvestir el cuerpo de un joven, violarlo, golpearlo, maltratarlo física y mentalmente, humillarlo, gasearlo, acorralarlo,   pero jamás, jamás, podrán desvestirlos del coraje, orgullo, valentía, ingenuidad, respeto y sentido de pertenencia que muestran cuando se visten con la bandera nacional, con el significado de sus tres colores y; cuando se ilumina con las siete estrellas que los guían,  sin pausa hacia el logro de la libertad.

Y hay que decir, en descargo, que el desnudo es el estado natural del ser humano, el más natural de todos los estados. Todo lo demás es accesorio, producto  de convenciones sociales y de costumbres morales impuesta por la sociedad y acatadas en su conjunto. Sabrá Dios con qué intención. Pero, en fin existe la vestimenta y se respeta. No obstante, el hecho de desnudar a un joven y someterlo al escarnio público es una forma de diezmar la voluntad, y además, una vieja práctica de los presos comunes, para avergonzar a los hombres y quitarles ese orgullo.

Este episodio y otros parecidos, que tienen que ver con dejar al desnudo la parte trasera de los muchachos, nalgadas, violaciones y desnudez total, me habla de la inocultable descomposición o infiltramiento de los cuerpos de seguridad del Estado.  Y pienso, si estos no serán simple y llanamente, reos comunes. Queda por descifrar y seguro se develará.

A mi manera de analizar la situación desde el punto de vista de las patologías conductuales  de los aberrados sexuales, existe una conducta y patrón de comportamiento en los actores de los últimos acontecimientos, que apunta, sin duda alguna, a una parafilia sexual. Por cierto,  que se da con mayor frecuencia en el sexo masculino hacia su propio sexo y se la califica como aberración sexual. Este asunto, no lo voy a entrar a  explicar, por razones del tema  central que me ocupa. No obstante, dejo en claro, que todo es posible...

Ahora bien respecto al desnudo y la desnudez, deseo agregar que el desnudo más escandaloso que puede haber es aquel donde, a pesar de estar vestido con los más ricos ropajes, no puedes ocultar tu esencia, esa que brota de cada poros  del cuerpo  y que nos permite a todos ineludiblemente, ver, mirar y apreciar el DESNUDO DEL ALMA.

Por último, pienso que este gobierno está desnudo ante el mundo y desnudo ante todo un pueblo y, ya es imposible,  taparlo porque no hay tela suficiente que pueda cubrir tanta DENUDEZ EXPUESTA.

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Citas:

*Me gustan los estudiantes, de: Violeta Parra. Cantautora chilena

**Los que Mueren por la Vida de: Alí Primera. Cantautor venezolano. 

Rnj/06/04/2014